El anuncio por sorpresa de la dimisión del conseller de Educación, Vicent Marzà, ha sido hoy el tema de conversación en los centros educativos. El cambio en la cara más visible del departamento de Campanar ha suscitado diferentes reacciones entre los variados representantes de la comunidad educativa, como los equipos directivos, los sindicatos y las ampas.
Los directores y directoras de Infantil y Primaria de la asociación Adip-PV afirman que el conseller “ha facilitado mucho el camino y el diálogo” y destacan que han compartido “mucho camino juntos”, con mención también para Miguel Soler, el secretario autonómico de Educación y FP.
En cuanto a los equipos directivos de Secundaria, desde Adies-PV, valoran la trayectoria de Marzà y destacan de estos años “la desaparición de los recortes, el aumento de la contratación de docentes, la implantación de la codocencia, la coeducación, la inclusividad y Edificant”.
No obstante, “es cierto que aún queda camino por recorrer”, reconocen desde Adies-PV, por lo que esperan que la conselleria continúe “con las diferentes líneas de acción, con la participación de las opiniones y propuestas de los diferentes miembros de la comunidad educativa”.
Por su parte, la Confederación de ampa Gonzalo Anaya considera que para renovar el sistema educativo “se necesitan más de 7 años”, pero de la gestión de Marzà destacan: “la gratuidad de los libros con Xarxa Llibres, la eliminación de la zona única en la admisión escolar; la bajada de las ratios de 30 a 25 y en 20 escolares/aula; la ampliación de unidades y plantillas docentes, las aulas gratuitas de 2 años; el incremento de las becas de comedor y de transporte; regular la inclusión educativa e introducir la figura de los orientadores en los colegios; la eliminación de barracones; la construcción y mejora de los centros o promover la innovación educativa; hechos a los que se suma haber hecho frente a la pandemia, con fondos extraordinarios”.
Como aspectos negativos, destacan “la falta de éxito en la necesaria coordinación entre las conselleries que aportan personal al sistema educativo (como los educadores) o haber regulado la jornada escolar continua sin estudios científicos y evaluación externa».
La concertada, en buena sintonía
En cuanto a la enseñanza concertada, sector con el que hubo conflictos en Educación en el arranque del Botànic pero que actualmente no cuenta con grandes frentes abiertos, la patronal Feceval afirma que le desean «todo lo mejor en el futuro» a Vicent Marzà, sin saber si ha sido una "decisión meditada desde hace tiempo o ha sido una precipitada" por la remodelación del Consell.
Así, se muestran «sorprendidos por la noticia, como toda la comunidad educativa», ya que los cambios que se comentaban en el gobierno valenciano en un principio solo parecía que afectarían a las carteras socialistas, han afirmado.
Desde Escuelas Católicas (Escacv) han valorado «la buena predisposición que ha caracterizado la Conselleria de Educación y del que ha sido su máximo responsable, Vicent Marzá, en estos últimos años». «Escacv quiere destacar la colaboración que ha existido con el hasta ahora conseller, especialmente, en unos cursos académicos marcados por la pandemia del covid-19», añaden. Le deseamos lo mejor en esta nueva etapa que ahora comienza», aseguran las mismas fuentes.
Reivindicaciones sindicales
Los sindicatos que han reaccionado al anuncio se puede decir que han apostado por dar 'una de cal y otra de arena' al conseller. Si bien desde Stepv también destaca "aspectos positivos como la recuperación e incremento de las plantillas recortadas por el anterior gobierno del PP" y las medidas apuntadas por las ampa, recuerdan que han mantenido "discrepancias con la gestión de la conselleria en temas como la ley de plurilingüismo, el decreto de orientación educativa y la supresión de los SPE o la carga burocrática que están sufriendo los centros educativos".
En cuanto a las condiciones laborales del profesorado, el sindicato ha firmado acuerdos con la conselleria "para reducir la carga lectiva del profesorado, mejorar los procedimientos de adjudicaciones o destinar partidas presupuestarias para combatir desigualdades salariales (algunas de las cuales todavía no se han ejecutado) entre colectivos".
"Pero quedan pendientes aspectos muy importantes como la reducción de las ratios, la negociación de las plantillas docentes (solo se ha iniciado en Infantil y Primaria) o la recuperación del poder adquisitivo perdido desde 2010. Finalmente, STEPV también ha manifestado sus discrepancias en la gestión del profesorado interino, en cuanto a garantizar su continuidad en el trabajo", afirman.
Por su parte, CSIF se ha mostrado más crítico y el sindicato pide a Raquel Tamarit, anunciada como la sucesora en Educación, "más talante negociador que su antecesor". "Marzá se ha marchado en una fase decisiva del curso, cuando todavía no se sabe el currículo para el próximo curso escolar; con el Plan Edificant empantanado; con varias sentencias perdidas contra CSIF por la imposición del plurilingüismo; con impagos de años a docentes por una gestión catastrófica o la aplicación del programa de estabilidad pendiente".
"CSIF confía en que Tamarit haga una apuesta decidida por la educación pública valenciana y no prime los anuncios sobre los hechos, como su antecesor, que se ha caracterizado por su nula negociación", concluye el sindicato.
