La vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, ha comparecido en la habitual rueda de prensa del pleno del Consell, en la que fundamentalmente se ha hablado de su imputación en el caso de abusos de su exmarido.

Oltra ha asegurado que no piensa dejar su cargo y que no ha hablado del tema con Ximo Puig. Según ella, apuntando al auto, no hay "prueba directa" que apoye los cargos de los que se la acusa.

"Siempre he desvinculado las imputaciones de las líneas éticas. Cualquier comparación con el comportamiento corrupto del PP es odiosa", ha indicado Oltra, tras insistir en que no iba a dimitir.

Oltra

También ha destacado que en todo momento ha actuado con transparencia y lealtad, y que siempre ha dado explicaciones tanto a nivel parlamentario como ante los medios de comunicación. "Nunca me he escondido, como sí han hecho otros", ha manifestado en alusión a Francisco Camps.

"Soy coherente y lo seguiré siendo. Es una postura política y ética", ha destacado, de nuevo en oposición a Camps.

Extrema derecha

"Es una cacería que parte de la extrema derecha", ha explicado, añadiendo que "esta gente no puede ganar". "Si me lo hacen a mí se lo pueden hacer a cualquiera".

Preguntada por los indicios que el TSJCV considera importantes, como el hecho de que conociera los abusos desde el principio, Oltra ha indicado que "esas cuestiones se resolverán en sede judicial". "Se está diciendo que hay 13 personas mintiendo para protegerme y perjudicándose ellas; es bastante inverosímil", señaló.

"No es la primera vez que me imputa el TSJCV", ha recordado en referencia al caso del proyecto de reforma del Cabañal, "y he sido expulsada de Les Corts por no aceptar la represión del PP corrupto".

"Hay varios pronunciamientos judiciales en los que la Conselleria no ha sido parte ni ha sido oída", ha manifestado.

Presión al Botànic

Preguntada respecto a si el Botànic podrá resistir esta presión, ha insistido en que "esto es una cacería política que viene de la extrema derecha que puede verse en las redes". "Esto no tiene nada que ver con hacer justicia. La presión se aguanta. A mí me presiona más hacer las cosas bien".

En referencia a si el PSPV está maniobrando para sustituirla en el cargo, ha sido categórica: "No se está haciendo". "Nos hemos visto esta mañana y me ha dado dos besos", incidió respecto a la comunicación con Puig.

Te puede interesar:

"Las 13 personas dijeron que no existió ninguna directriz y que actuaron de manera independiente y profesional. Tenemos un problema en este país si la verdad es increíble. Iré allí (en referencia al juzgado) y diré la verdad".

"Compartía inmueble, no convivencia" con su expareja en el momento de los hechos, reconoció, y añadió que fue conocedora de los abusos el "4 agosto del 2017".