Un conductor ebrio y drogado mata a un policía nacional en moto en Valencia
La Guardia Civil ha detenido a una persona por la muerte del motorista, al que arrolló por detrás cuando circulaba bajo los efectos del alcohol y las drogas
El agente, de 33 años, regresaba a casa tras terminar su turno en la Inspección Central de Guardia de Zapadores

Imagen de archivo de Policía Nacional. / Policía Nacional
Ignacio Cabanes
La Guardia Civil ha detenido al conductor del vehículo que esta pasada noche arrolló la motocicleta en la que circulaba un agente de la Policía Nacional, de 33 años de edad, en la autovía AP-7 a la altura de la localidad de Tavernes de la Valldigna, acabando con su vida. El arrestado, que ha dado positivo en alcohol y en consumo de sustancias estupefacientes al volante, colisionó por detrás con la moto cuando Iván M. P. regresaba a su casa tras terminar su jornada de trabajo en la Inspección Central de Guardia (ICG) del complejo policial de Zapadores, en València.
Hasta el lugar del accidente se trasladó una ambulancia del SAMU y un Soporte Vital Básico, pero pese a los intentos por reanimar al motorista, el policía finalmente falleció como consecuencia del accidente. El grupo de Atestados de la Guardia Civil de Tráfico se hizo cargo de la investigación del siniestro y ya hay una persona detenida como presunta autora de un delito de homicidio por imprudencia grave y un delito contra la seguridad vial, por circular bajo los efectos del alcohol y bajo la influencia de las drogas.
El policía fallecido estaba destinado en la Inspección Central de Guardia (ICG) del complejo policial de Zapadores. De hecho, en la tarde de ayer estuvo trabajando hasta las once de la noche y se encontraba regresando a su domicilio, en Gandia, cuando fue embestido por detrás por un turismo conducido por un conductor ebrio.
El siniestro se produjo a las 23.20 horas en el punto kilométrico 568 de la AP-7, sentido Gandia. La Guardia Civil de Tráfico investiga las circunstancias del mismo y según ha podido confirmar este periódico ya hay una persona detenida por estos hechos.
El policía, identificado como Iván M. P., llevaba tres años en la ICG y estaba pendiente de que saliera una plaza para poder marcharse a la comisaría de Gandia, donde ya había estado haciendo prácticas. Soltero y sin hijos, cada día de trabajo, como fue ayer, cogía la carretera de regreso a la localidad de la Safor donde residía.
El accidente se produjo a la altura de Tavernes de la Valldigna, a solo quince kilómetros de llegar a su destino. En su camino se cruzó un conductor ebrio y drogado al volante, que acabó con su vida. Los compañeros de Iván lamentan su muerte y destacan lo gran profesional que era y su calidad humana con los detenidos con los que trataba a diario en los calabozos de la ICG de València.
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