Los expertos ya auguraban un incremento en los contagios, aunque, de momento, la provincia esquiva la cuarta ola, que afecta a algunas comunidades autónomas, a pesar de un leve emparamiento en la situación epidemiológica. Los casos van al alza, especialmente, en Burriana que alcanza los 105 positivos y una incidencia acumulada de 302,74, situándose en riesgo extremo. La localidad ha sufrido diferentes brotes en los últimos días que han llevado a la mezquita y a una iglesia evangélica a cerrar sus puertas por motu propio como medida preventiva para evitar la propagación.

Según los datos por municipios publicados por la Conselleria de Sanitat este viernes, hay otras dos grandes localidades con las alertas encendidas, la Vall y Nules. La primera acumula 44 infectados en los últimos 14 días y una incidencia que marca 138,98, mientras que la segunda incrementa los contagios hasta los 32 y dispara su incidencia hasta los 244,22. Con este indicador por encima de 100 también está Benicàssim, aunque logra reducir los positivos a 21.

Por su parte, Castelló también incrementa los infectados, pasando de 60 a 82 en tres días, aunque logra mantener su incidencia por debajo de 50. Vila-real, con 33 casos, también registra un ligero aumento.

Otras grandes poblaciones como Almassora con nueve casos, Onda con tres, Benicarló con ocho, Vinaròs con 16 o l'Alcora con uno logran mantener el virus a raya.

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Riesgo en el departamento de la Plana

El hecho de que las localidades donde más se han disparado los contagios pertenezcan al departamento de salud de la Plana ha lastrado la incidencia acumulada de este área de salud hasta los 121,22, el triple que el de Vinaròs, con 42,97, y que el de Castellón con 47,70. Por tanto, la Plana sigue siendo el departamento, de los 24 que hay en la Comunitat, con más riesgo, teniendo en cuenta que este indicador, en el conjunto de la Comunitat, está en los 40 casos por cada 100.000 habitantes