Los expertos ya auguraban un incremento en los contagios, aunque, de momento, la provincia esquiva la cuarta ola, que afecta a algunas comunidades autónomas, a pesar de un leve empeoramiento en la situación epidemiológica. «La Comunita ha logrado situarse en una especie de isla con muy buenos datos, gracias las restricciones y a la concienciación ciudadana, al margen de otras comunidades como País Vasco, Madrid o Navarra con peores datos», explicó el presidente de la Sociedad Valenciana de Medicina Preventiva y Salud Pública, Juan Francisco Navarro, quien advirtió de que se ha conseguido no sucumbir al efecto contagio debido al cierre perimetral de la Comunitat.

«De momento, no ha habido cuarta ola, aunque cuando se levante el confinamiento de la región habrá que ver qué pasa, porque entonces no nos podremos aislar como ahora», apuntó Navarro, al tiempo que remarcó que el previsible efecto de Semana Santa en un incremento considerable de contagios no se ha producido.

"Crecimiento lento"

En este sentido, Sanitat, a pesar de que la Comunitat es la autonomía con una menor incidencia y una de las mejores zonas de Europa en cuanto a contagios, está empezando a notar un «cambio de tendencia» de la curva epidémica con un ritmo de crecimiento «lento pero constante». Así lo refleja un informe de la Subdirección General de Epidemiología, Vigilancia de la Salud y Sanidad Ambiental, que señala que el peligro persiste por la existencia de brotes «complejos» en algunos municipios, como Burriana. La localidad alcanza los 105 positivos y una incidencia acumulada de 302,74 casos por cada 100.000 habitantes, tras sufrir diferentes brotes en los últimos días que han llevado a la mezquita y a una iglesia evangélica a cerrar sus puertas como medida preventiva.

Datos por municipios

Hay otras dos grandes localidades con las alertas encendidas, la Vall, con 44 casos, y Nules, con 31. Por su parte, Castelló también incrementa los infectados, pasando de 60 a 82 en tres días, aunque logra mantener su incidencia por debajo de 50. Vila-real, con 33 casos, también registra un ligero aumento y Benicàssim, con 21 los reduce. Otras grandes poblaciones como Almassora con nueve casos, Onda con tres, Benicarló con ocho, Vinaròs con 16 o l’Alcora con uno logran mantener el virus a raya.