Los grandes municipios de la provincia de Castellón siguen la tendencia positiva a la baja, reduciendo los contagios de manera significativa. Los datos constatan un importante retroceso del coronavirus. Castelló suma 76 nuevos positivos, es decir, casi 20 menos que el pasado viernes, según los datos que publica la Conselleria de Sanitat dos veces a la semana. De igual modo, Vila-real disminuye sus casos hasta 33, seis menos.

La Vall d'Uixó contabiliza 12 casos, Almassora 10, Vinaròs ocho, al igual que Burriana, mientras que Onda y Nules tienen cuatro. Benicàssim ha registrado tres, l'Alcora dos y Benicarló uno.

Nueva normalidad

La evolución es positiva, especialmente, en Burriana, Onda, Benicarló, Benicàssim y l'Alcora, ya que todos estos municipios se encuentran en la llamada nueva normalidad, es decir, cuentan con una incidencia acumulada por debajo de los 25 casos por cada 100.000 habitantes. El resto de poblaciones se situarían en riesgo bajo al tener este indicador entre 25 y 50 casos, excepto Vila-real que, a pesar de reducir contagios, sigue teniendo una incidencia superior, en concreto, 64.

Por tanto, la provincia consigue estabilizar su tendencia a la baja y no se resiente de la flexibilización de medidas anticovid, como la eliminación del toque de queda. Además, esta mejora en la evolución se debe al avance de la vacunación.

Comisión interdepartamental

Las actuales limitaciones de la desescalada finalizan el 30 de junio, por lo que el Consell prevé a principios de la próxima semana reunirse para seguir suavizando algunas restricciones, entre ellas, se espera avanzar en el ocio nocturno.