Una joven Judy Garland haciendo de granjera de Kansas y cantando Over the rainbow en el El mago de Oz, de 1939, es el mejor momento musical de la historia del cine de EEUU. Así lo han decidido en Hollywood los 1.500 actores, directores, guionistas y críticos del American Film Institute y que acaban de elegir las 100 mejores canciones de películas. Otros dos clásicos, As time goes by (Casablanca) y Cantando bajo la lluvia ocuparon el segundo y tercer puesto, respectivamente.

John Travolta --cuyas películas Fiebre del sábado noche y Grease aparecen en la lista--, anunció los títulos más votados. Elegida entre 400 finalistas, esta lista es la última apuesta del instituto norteamericano del cine para promocionar la historia del séptimo arte, que ya tiene sus 100 mejores héroes y villanos, historias de amor y de miedo, comedias, estrellas y largometrajes.

Ahora les ha tocado a las canciones para que "las viejas generaciones vuelvan a encontrarse con estas películas y los jóvenes las vean por primera vez", dijo el director del instituto, Jean Picker Firstenburg. "Largometrajes y canciones están tan ligados que incluso antes de que llegara el sonido al cine había temas que acompañaban las secuencias mudas", subrayó Bob Gazzale, productor de la gala especial.

La más veterana de la lista, Isn´t it romantic, la cantaron Maurice Chevalier y Jeanette MacDonald en Love me tonight (1932). La más reciente, All that jazz, reveló el talento para el musical de Catherine Zeta-Jones y Renee Zellweger en Chicago (2002). Entre los elegidos también figuran Eminem, con Lose yourself, de 8 millas (2002), el It had to be you de Cuando Harry encontró a Sally (1989), éxitos de taquilla como Titanic e himnos incombustibles como Born to be wild, de Easy rider (1969). "Son canciones que forman parte de nuestra vida diaria; yo todavía escucho Up where we belong, señaló Jennifer Warnes, intérprete de los momentos musicales de Oficial y caballero y Dirty dancing.