La Escuela Taurina de Castellón ha estado presente este fin de semana en dos de las ferias más importantes de junio y julio, la de Hogueras de Alicante y la del Ángel de Teruel. Y lo ha hecho a través de uno de sus alumnos más aventajados, Marcos Andreu, que ha competido en sendos certámenes con los mejores novilleros sin picadores del momento y ha dejado muy buenas sensaciones.

El joven novillero de Rafalafena cortó una oreja el viernes en Alicante. A pesar del mal uso con los aceros resultado premiado, fruto del buen nivel al que rayó en todo momento. Marcos fue todo entrega y se mantuvo en el papel de novillero ambicioso, algo que ya dejó claro de primeras en su tarjeta de presentación al recibir a su novillo a portagayola.

En Teruel tuvo menos suerte este domingo con un novillo de Teodoro Adell, que en general, envió un encierro tan noble como falta de raza. Marcos Andreu toreó en último lugar y se mostró muy por encima de un animal deslucido y desrazado. Se fue a portagoyola de nuevo, en un gesto de actitud encomiable que nunca falla, y después sacó recursos frente a un novillo anclado al piso. Lo peor de todo fue, nuevamente, el manejo con los aceros, por lo que escuchó los tres avisos.Tuvo el detalle de brindar su faena a Marta Borao, novillera turolense, que debutaba en su tierra, formada también en la Escuela de Castellón, pero que ha decidido seguir su propio camino.