El director del Museo del Prado, Miguel Falomir, ha presentado este miércoles un avance de las exposiciones más importantes que tendrán lugar a lo largo de 2021, siempre con la cautela que exigen estas condiciones extraordinarias que, como él mismo ha dicho, se han convertido en las habituales. Así, la palabra incertidumbre parece inevitable que se encuentre presente en todo momento a la hora de hablar del futuro inminente de la institución.

El cierre de la pinacoteca durante la pandemia ha obligado a trasladar a este año parte de las exposiciones programadas. Solo una, en principio, no se podrá realizar por el momento, la dedicada a William Blake y sus ilustraciones para 'La Divina Comedia'. La National Gallery of Victoria de Melbourne, donde se encuentra este conjunto de 36 acuarelas con muy alta sensibilidad a la luz, ha dejado en suspenso su traslado debido a las nuevas restricciones.

Tiziano y Felipe II

Nuevos públicos, nuevas narrativas era la idea central en la que se englobaban las actividades de 2020, que ahora se retomarán con la muestra 'Pasiones mitológicas. Tiziano, Veronese, Allori, Rubens, Ribera, Poussin, Velázquez, Van Dyck'. Por primera vez desde el siglo XVII se reunirán las seis pinturas mitológicas más influyentes de la historia, basadas en la poesía clásica griega, conocidas como 'Poesías' y pintadas por Tiziano para Felipe II entre 1551 y 1562. Junto a ellas, se expondrán otras obras que han bebido de ese influjo.

Será sin duda la exposición temporal más ambiciosa ya que está coorganizada con la National Gallery de Londres, la National Galleries of Scotland de Edimburgo y el Isabella Stewart Gardner Museum de Boston. Podrá visitarse a partir del 2 de marzo hasta el 4 de julio.

El gran reclamo para el tercer trimestre del año, a partir del 5 de octubre, será 'Tornaviaje. Arte iberoamericano en España', en lo que supone la apertura del Prado a las 'nuevas geografías', en este caso, aportaciones artísticas del Nuevo Mundo en Europa, para otorgarles la visibilidad que merecen ya que durante siglos han convivido y se han integrado en nuestro imaginario.

Mirada contemporánea

¿Qué pasará con la colección permanente? Como era de prever se pondrá el foco en ella, reorganizándola para alejarse de los modelos decimonónicos que se habían perpetuado y acercarla así a una mirada más contemporánea abierta a nuevas sensibilidades y a las realidades del siglo XXI. "No se moverán los cuadros atendiendo a un capricho, pero está claro que hay que repensar los criterios historiográficos de acuerdo con nuestro presente", ha declarado Miguel Falomir.

Se trata de dar una visión más plural que afectará a la incorporación de muchas creadoras que no habían tenido el espacio que merecían, como Clara Peeters, Sofonisba Anguissola, Lavinia Fontana o Artemisia Gentileschi. También se abrirá el museo a culturas excluidas que están ganando posiciones en la actualidad, como la filipina, así como a temáticas puramente sociales. Se prevé que esta nueva estructura pueda verse de cara al verano y afectará a las salas de pintura europea del siglo XVIII, aplicando los nuevos criterios utilizados en las salas de Goya y pintura española, en la que se incorporan algunos ejemplos europeos. Además, la pintura del siglo XIX presentará un discurso totalmente nuevo y se abordarán las intervenciones previstas que no se pudieron completar el pasado año.

También habrá una nueva sala dedicada a la Historia del Museo del Prado, en el lugar donde hasta ahora se exhibía el Tesoro del Delfín, enfocada a trasmitir al público los conceptos básicos del edificio, su evolución, su ampliación, así como las características de las instalaciones expositivas y equipamiento a lo largo del tiempo.

Más pinacoteca en 2025

La ampliación de lo que fue el antiguo Museo del Ejército añadirá a la pinacoteca 5.700 metros cuadrados. Este proyecto firmado por Norman Foster y Carlos Rubio comenzará el próximo noviembre después de que el Gobierno incluyera una línea de financiación en los Presupuestos Generales del Estado. Las obras durarían cuatro años y si todo va bien, terminarían a finales de 2025.

Durante estos meses el museo tendrá otros reclamos, como la primera gran exposición en torno a Marius van Reymerswale? (9 marzo-13 junio), El hijo pródigo de Murillo y el arte de narrar el Barroco andaluz? (21 septiembre-23 enero 2022), en torno a la serie del pintor sevillano, la primera realizada en España de este episodio de la Biblia; o Leonardo y la copia de Mona Lisa. Nuevos planteamientos sobre las prácticas del taller vinciano (28 septiembre-30 enero 2022).

Miguel Falomir ha reconocido que el covid-19 ha acelerado muchos de los cambios que aparecían en el horizonte, como la importancia de la actividad digital, que ha servido durante la pandemia para acercar el arte a los ciudadanos confinados. En ese sentido, comenzarán a idearse actividades enfocadas al online.