El Museu de Belles Arts de Castelló ha incorporado recientemente tres nuevas obras a su exposición permanente, ampliando de este modo su fondo pictórico.

Una de las piezas adquiridas es de Joan Sarinyena (1545-1619) pintor formado en Roma y que, después de volver a València en 1580, se convirtió en el gran pintor de la ciudad. La obra es de principios del siglo XVII y se trata de un retrato de tono piadoso, sobrio y severo, de coloración de gama fría, de un desconocido fraile carmelita, de medio cuerpo, contemplando un crucifijo y con las manos juntas en actitud de oración. Destaca por su naturalismo sin ningún rasgo de idealización.

El segundo de los cuadros es un excelente retrato pintado por quien fue primer pintor de cámara de Fernando VII, director del Museo del Prado y director general de la Academia de San Fernando, el valenciano Vicent López Portaña (1772-1850). Se trata del retrato del torreblanquino fray Domingo Fabregat Moliner, maestro general de la orden de la Merced de 1801 a 1812, vinculado directamente con la ciudad de Burriana.

La última de las obras es un gran lienzo de Ramón Stolz Viciano (1903-1958), pintor vinculado a Castellón. El nuevo cuadro, titulado El estudio del pintor, en torno al año 1934, es de marcado sentido narrativo y el autor se autorretrata en su estudio, de espaldas al espectador, en pleno trabajo físico, rodeado de los materiales de su oficio y con sus aprendices y oficiales.