Los escritores locales triunfan en las librerías de la provincia de Castellón. Esa es la información que facilitan quienes más saben de lo que prefieren elegir los lectores, los libreros. Y entre los top ventas se encuentran nombres como Julio César Cano o Eloy Moreno, que cuentan con una legión de fieles seguidores, demostrando que la literatura provincial puede tirar, y tira, de este vapuleado sector.
Aunque lo cierto es que las preferencias varían ligeramente dependiendo de a qué establecimiento preguntes. En el caso de una librería como Argot, en Castelló, Cano y su inspector Monfort encabeza el listado de los preferidos, seguido por Yolanda Gaspar, Aleix Centelles y Rachel Brenes con su historia Kalu, y Eloy Moreno con sus últimas novelas, Tierra e Invisible, respectivamente.
Pero si nos desplazamos unos kilómetros hacia el norte, en la librería Noviembre de Benicàssim, es un escritor de los que podrían calificarse de culto, Luis Rodríguez --que recientemente ha presentado su nueva obra, Mira que eres-- el que más veces se solicita entre los autores del terreno.
En el caso de Argot, los locales le han ganado el pulso incluso a los imponentes y mediáticos premios Planeta, como La Bestia de Carmen Mola, que en su balance se posiciona por detrás de dos locales más, Nando López con Nadie nos oye y Maribel Escrig, con Lluvia de Azahar. En contrapunto, en la librería de Benicàssim reconocen que los Planeta «son los que más salida tienen estas fechas».
Balance con matices
Respecto a las cifras que arroja el sector, algunas estadísticas apuntan a que, respecto al 2020, las ventas han aumentado entre un 30 y un 40%. Pero los datos, según inciden en Librería Argot, hay que saber interpretarlos, porque el cierre comercial impuesto por el confinamiento a principios del año pasado supuso una caída en picado de ingresos, por lo que para hacerse una composición de lugar más exacta, habría que comparar con los años previos a la pandemia, y aunque es cierto que ha habido una subida, «no se han recuperado los niveles previos al 2020».
Con todo, la propietaria de Noviembre afirma que «no sé si hay más lectores, pero sí que hemos notado un cambio en los hábitos de compra, en nuestro caso vemos a más adolescentes, lo que da mucha alegría, porque son los que van a aguantar todo esto».
