¿El escritor es libre?

Rosario Raro es profesora de Lengua Española en el departamento de Traducción y Comunicación de la UJI. Ha publicado las novelas Volver a Canfranc, La huella de una carta, Desaparecida en Siboney y El cielo sobre Canfranc. Todas, en la editorial Planeta. Rosario es un alma inquieta y cuando no está escribiendo o impartiendo clases dirige el taller literario de la universidad o colabora en proyectos con el Ministerio de Cultura. El éxito, tanto de crítica como de público, le sonríe, aunque ella, siempre con los pies en la tierra, no se ha dejado llevar por cantos de sirena y continúa tan vinculada a Castellón como siempre.

Luis Rodríguez detesta las etiquetas, tal vez por eso no puede escapar de ellas. Para algunos lectores es un escritor de culto, para otros es un autor maldito, para el digital El Confidencial es, simple y llanamente, «el escritor más moderno del panorama literario actual en lengua castellana». Ha publicado las novelas Ocho treinta y ocho y Mira que eres con la editorial Candaya. Anteriormente publicó El retablo de No y La herida se mueve, con Tropo Editores.

Vicent Gascó proviene de la dirección de Recursos Humanos, carrera profesional que abandonó para poder dedicar más tiempo a sus dos grandes pasiones: los viajes y la literatura. Publica con la editorial castellonense Unaria y hasta la fecha tiene en su haber tres títulos: El círculo XY, Amado Amati (colección Castelló Negre) y Los perros del bambú.

Tertulia y buena gastronomía

Tras degustar un arroz negro y unos torreznos, cuidadosamente elaborados por el equipo profesional de Café 56, y tras un par de generosas copas de Ribera del Duero, la conversación ganó fluidez, no sin cierto aire reivindicativo como suele ser habitual cuando dos o más escritores se reúnen en torno a una buena mesa.

Según Raro, la materia prima de la escritura es la libertad. Sería capaz de escribir por encargo, pero le costaría defender el texto. Según Gascó, el éxito es hacer lo que te gusta, cuándo y cómo te gusta. Y eso solo puede llevarse a cabo con libertad. Ambos afirman que sus editoriales, Planeta y Unaria, les han respetado. Rodríguez opina del mismo modo, pues siempre ha escrito lo que ha querido y por suerte se ha encontrado con editores respetuosos. Ahora bien, esa libertad no siempre casa con las reglas comerciales. 

Respecto a la llegada de nuevos autores a las editoriales nacionales, coinciden en que el papel que antes realizaban los agentes literarios lo están asumiendo las redes sociales, las grandes páginas web literarias y comerciales, y Amazon. El presente de un autor joven en el mundo digital puede condicionar su futuro profesional.

En cuanto al panorama editorial, Rodríguez afirma que jamás ha habido un momento tan rico y bello. Raro confirma que hay editoriales exquisitas, que cuidan al máximo el papel y el gramaje. Y que el libro ha resistido a la digitalización mucho mejor que la música o el cine. «El audiolibro puede ser el nuevo camino digital de la literatura», afirma Gascó. Según Rodríguez, «el audiolibro y la lectura tradicional son complementarios. Un libro de 400 páginas se extiende, en audiolibro, cerca de 12 horas».

Similar reflexión genera el libro digital. Libro en papel y libro digital pueden y deben convivir.

Volviendo a la libertad, una estrategia editorial inteligente, según Rosario Raro, interfiere mínimamente en el trabajo del escritor. Los editores dejan a los autores a su aire y su trabajo se centra en la selección de los mismos.

Y hablando de ferias y eventos, a los tres les gustan mucho los clubes de lectura, así como las rondas de medios. Y, del mismo modo, los tres autores disfrutan presentando sus novelas en ferias.