Era 2012 cuando Juan Magán inundó durante meses y meses las radios y discotecas de toda España con una vuelta de tuerca al reggaetón, un estilo que había vivido su primera época de gloria mediada la primera década del siglo XXI pero que mostraba, alrededor de 2010, síntomas de desgaste en España y cedía espacio a marchas forzadas ante la electrónica de masas (EDM). Magán, catalán pero apasionado por la música latina, supo ver el hueco abierto para cambiar tendencias. Era una época de estigma para el reggaetón y, por consiguiente, para la idea que Magán tenía en la cabeza, pero aun así la sacó adelante: era el electrolatino. Yomo decía aquella canción de Pont Aeri: once años después, aún la está rompiendo. Eso es lo que se verá en Almassora el próximo 29 de septiembre en el recinto de conciertos junto a la piscina municipal, el presente y el futuro del género.
El rey del electrolatino llega a Castellón
Magán es un tipo peculiar. Nació en Cataluña, no tenía ningún vínculo con Latinoamérica, pero decidió hacer el camino opuesto a muchos latinoamericanos durante los primeros años del siglo. Él se marchó a vivir a la República Dominicana y se empapó de la música que sonaba allí. De todas ellas, parece que se quedó con el merengue. Eran tiempos donde allí nacía una fusión entre merengue y reggaetón: el merenguetón. Magán propulsó este estilo en España, pero, al ser el único referente de esa corriente que llegaba a este país, tuvo la capacidad de incluso renombrarlo. La palabra electrolatino la tiene cualquier persona que haya nacido entre 1985 y 1995 (aproximadamente) en la península. Era la palabra que sonaba al principio de cada canción de Magán, algo así como un sello.
Tras un par de años de fama, Magán afrontó entonces lo mismo que le tocó sufrir al reggaetón. Su música fue generalmente calificada como pobre por la crítica y, en un fenómeno no exento de clasismo (y una pizca de racismo), fue enterrada por la sociedad. En 2015, la sociedad española trató de ocultar con cierta vergüenza que, un par de años atrás, lo daban todo con Bailando por ahí o Ella no sigue modas (en la que colaboró, por cierto, Don Omar).
Unos diez años después y ya despojados de cualquier tipo de prejuicio sobre la música latina (el reggaetón viene de vivir una segunda edad dorada), el electrolatino tiene su revival particular. Y Magán continúa al frente.
La nueva sensación en la era de TikTok
Karetta el Gucci sí que es dominicano. Ejerció como peluquero y saltó a la fama gracias a TikTok. Su tema Fake Capo revolucionó esa red social después de que millones de personas le pusieran coreografía y la bailaran. Karetta, uno de los protegidos de Magán y heredero de ese sonido autóctono de merengue y electrónica, llegará a Almassora como principal telonero. En su corta carrera ya ha colaborado con uno de los referentes de la música urbana actual en España, como es Omar Montes.
El hermano que ha tomado su camino
Este año se han viralizado en TikTok varios temas de latineo en catalán. El que más se compartió fue el Coti x Coti de The Tyets, pero Víctor Magán junto a Buhos consiguieron que El món de veritat también corriera por las redes. Allá por 2010 triunfó en las listas dance con Love Is a Gamble y Wenacom, unos temas más electrónicos.
Una propuesta ‘dance’ para cerrar la noche
El Electrolatino Fest tendrá un cierre más dance con Jose AM, que también tiene su toque salsero particular. Después, cerrarán la noche en la pista otros dj’s de estilos similares, como son Gonan Drew, Suga y Xavi Reverté. H