El amor eterno de ‘Romeo y Julieta’ llegará a Onda

Dos jóvenes enamorados, un amor prohibido y un destino sellado por la tragedia. ¿Les suena esta historia? En las calles de Verona, entre el odio ancestral de los Montesco y los Capuleto, Romeo y Julieta desafiaron las normas, soñaron con un futuro imposible y sucumbieron a un destino inquebrantable. Su relato, imaginado y escrito por uno de los autores más universales, como fue William Shakespeare, tejido con pasión y lágrimas, ha perdurado a través de los siglos, encontrando también en la danza una de sus formas más sublimes de expresión.

Cita imperdible

Onda se convertirá en un escenario privilegiado para revivir esta conmovedora historia de amor. Será el próximo 23 de marzo, a las 18.00 horas, en el Teatro Mónaco, y de la mano del Ukrainian Ballet Theater Premiera, que representará la inolvidable obra inspirada en el drama shakespeariano bajo la excelsa música de Serguéi Prokofiev y la coregografía de Viktor Shcherbakov.

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Esta representación es, además, todo un acontecimiento y una oportunidad para los amantes del ballet clásico. Lo es porque la compañía ucraniana ha iniciado este año su primera gira por España y ha elegido Onda como una de las pocas paradas de su tour de debut. En una velada donde la danza se fusionará con la tragedia, el público tendrá el honor de presenciar la pasión desbordante, la desesperación y el inquebrantable amor de los jóvenes de Verona, en una coreografía que promete deslumbrar por su belleza y profundidad emotiva.

Un mundo de contrastes

El telón se abrirá para revelar un mundo de contrastes: de la algarabía de los mercados renacentistas a los duelos a espada que enfrentan a los Montesco y los Capuleto. Entre estos escenarios de odio y rivalidad, el amor se alza como una llama ardiente en los cuerpos de Romeo y Julieta, interpretados por bailarines cuya entrega y virtuosismo transportarán a los espectadores a un viaje de emociones desbordantes. La intensidad de cada giro, la ternura de cada caricia coreografiada y la tragedia inexorable de su destino se sucederán en un espectáculo que quedará grabado en la memoria de quienes tengan el privilegio de asistir.

Así, Onda se convertirá en un refugio para la poesía del movimiento, un templo donde la música de Prokofiev y la sensibilidad del ballet alcanzarán su máxima expresión. Cada nota de la partitura envolverá la escena con la solemnidad de la tragedia, elevando el arte de la danza a un nivel sublime.

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La cita está marcada. La historia, inmortal. Y Onda, por una noche, será el epicentro donde la danza se convierta en poesía.