El Leoni plantó cara en una difícil pista como es la del tercer clasificado, el Plasencia. El partido estuvo muy disputado y cualquiera de los dos conjuntos hubiera podido llevarse la victoria.

Los primeros 20 minutos tuvieron dominio visitante con un espectacular segundo cuarto castellonense, en el que se consiguió tapar a los tiradores locales Morales y Lledó, y al pívot Okac, que alcanza los 2.17 metros de altura y que a la postre fue el máximo anotador del encuentro al llegar a los 19 puntos.

La segunda mitad fue bastante igualada y, cuando restaba minuto y medio, los azulejeros sólo perdían de cuatro puntos. La presión, la necesidad de puntos y la superioridad local, propiciaron que en la recta final los de Plasencia arrollaran a los castellonenses, que ven más que complicada su posición en la tabla clasificatoria, a pesar del gran partido que jugaron.