El fútbol volvió a mostrar ayer su peor cara. Una treintena de aficionados ultras del Burgos y posiblemente de otros equipos, causaron un grave altercado en el Bar Moliner.
Aparecieron en el citado establecimiento, donde suele reunirse un determinado grupo de seguidores del Castellón, con el rostro cubierto y armados con bates de béisbol y palos de madera.
En el interior del bar comenzaron a golpear a los clientes e incluso encendieron dos bengalas. Además, rompieron parte del mobiliario del local. Por último, los presuntos agresores también intentaron incendiar un contenedor de basura próximo al bar. Todo ocurrió entre las 15.30 y las 16.30 horas.
Ante la gravedad de los hechos se personaron en el establecimiento, sito en la calle Nules, efectivos tanto de la Policía Local como de la Policía Nacional.
Las fuerzas de orden público procedieron a la detención de dos jóvenes presuntamente implicados en los hechos. Se trata de M. Q. C., de 29 años y vecino de Burgos, y de M. Q. M., de 28 años y vecino de la misma ciudad.
Además, se procedió a la identificación de otros supuestos participantes en la tropelía --11 en total, vecinos de Burgos, Madrid, Valencia y Palma de Mallorca-- y a la incautación de bates de béisbol, un espray lacrimógeno...
Pero antes de todo ello, se procedió a la evacuación de los dos heridos, ambos vecinos de Castellón. Uno de ellos, que al parecer recibió un golpe en la cabeza, ya ha sido dado de alta mientras el otro, a causa de unos importantes cortes en el brazo, necesitó ser intervenido quirúrgicamente. Al cierre de esta edición se desconocía su estado.
Cabe recordar que en el partido de la primera vuelta aficionados albinegros ya sufrieron daños en sus vehículos.
