El de ayer también fue un día de reencuentros entre los futbolistas argentinos del Villarreal y el Mallorca. Antes del partido, Martín Palermo saludó efusivamente a la gran estrella del equipo bermellón, Ibagaza. En el descanso, Arruabarrena hizo lo propio con Turu Flores, uno de los componentes del banquillo del conjunto de Gregorio Manzano.