La victoria de Mestalla ha reavivado el espíritu siempre luchador y ambicioso de Fernando Roig. La angustia de la permanencia ha desaparecido desde el domingo de su cabeza, y la cuarta temporada consecutiva en Primera es un éxito que le ha insuflado la fuerza suficiente para preparar el futuro del Villarreal. El presidente amarillo, en una entrevista concedida ayer a R dio Vila-real, clarificaba algunos de los principales temas de la actualidad del Submarino.

El primero, el futuro de Palermo. El presidente reconocía la existencia de ofertas para fichar al argentino: "Existe el interés de ciertos equipos, pero eso se verá a final de temporada". "Dependerá de lo que más le convenga al club y al jugador", añadía. Roig era claro al señalar que no podía asegurar que "Palermo juegue en el Villarreal la próxima temporada".

QUITA PRESIÓN AL ARGENTINO

El presidente le dio una lección de señorío al jugador. Mientras el argentino criticaba en su país la relación entre los diferentes jugadores del club que le paga religiosamente, Roig defendía la falta de acierto rematador de Palermo. "Es difícil hacer goles. No pasa nada, ya le vendrá la racha buena. Es un jugador más de la plantilla y queremos que cumpla el contrato", manifestaba quitándole la presión al Matador amarillo.

El presidente también destacó la calidad humana de la plantilla, por sí aún existía alguna duda: "En el vestuario el ambiente es muy bueno. No tengo ninguna duda sobre ello. Ahora mismo los jugadores --por ayer-- están juntos en una parrillada".

Roig también pidió la ayuda de la afición amarilla ante el Celta, en el que se pueden obtener los tres puntos necesarios para certificar definitivamente la permanencia en Primera, una temporada más. "Con el triunfo ya no habrá más sufrimiento y estaremos tranquilos", aseveraba el presidente del Villarreal en los micrófonos de R dio Vila-real.