El reglamento del fútbol contempla un largo y variado abanico de posibilidades a la hora de sancionar las incorrecciones sobre un terreno de juego. Sobre este tema, los jugadores del Atlético de Madrid podrían dar largas conferencias y hacerlo con perfecto conocimiento de causa, ya que se han convertido en el mayor generador de ingresos para la Federación en el apartado disciplinario.

Las han visto por todas las causas posibles y sorprende sobremanera que algunos de los destacados a la hora de infringir el reglamento sean delanteros. El mismo José Mari, tal vez contagiado de la dureza del fútbol italiano, no se ha adaptado totalmente en su regreso a España y ha tocado todos los palos.

Fernando Torres, la joya rojiblanca, tampoco se libra y ha visto su media docena. Los agarrones y las zancadillas son las grandes especialidades colchoneras, pero tampoco tienen desperdicio las protestas. Ya en Málaga, Gil amenazó con intervenir y tomar medidas porque el equipo no acababa los partidos con 11, pero de poco ha servido.

Sólo el Atleti ha superado el centenar de amarillas, a las que debe añadirse 10 rojas. En el año del centenario, los del Manzanares están haciendo historia por ser los reyes de la tarjeta.