El sufrimiento es uno de los elementos inherentes al éxito. Al menos para Quero. La experiencia le dice al mediapunta de Fuengirola, un auténtico veterano de las liguillas de ascenso --ha disputado cinco antes de llegar al Castellón, cuatro con el Córdoba y una con el Zamora--, que señala que "sólo así se logrará el ansiado éxito", en referencia al ascenso. "Recuerdo que, con el Córdoba, llegamos a perder 5-0 en Ferrol y nos la jugamos en los dos últimos partidos ante el Cartagonova. A ellos les valía un empate... pero nosotros ganamos los dos partidos", recuerda Quero. "Otras veces, el ascenso parecía cantado y, al final, nos quedamos a las puertas", contrapone el malagueño.

Pero lo cierto es que el Castellón lo está pasando peor de lo esperado. Y el equipo lo sabe. "Fue incomprensible el baño que nos dio el Pontevedra en los últimos 20 minutos de la primera parte", reconoce Quero. "No estamos al mejor nivel. Ahora, los rivales llegan a nuestra portería con mayor facilidad. Evitarlo es cosa de todos", receta el habilidoso punta.

De todos modos, Quero apunta que la actitud no ha variado. "Si no peleáramos, no habríamos llegado a la liguilla; y ahora lo seguimos haciendo, tanto o más que antes. El problema es que corremos desordenados, mal y a destiempo", analiza el jugador albinegro más veterano en las lides de disputar promociones.

En cuanto a su actuación personal, Quero sabe que puede dar más de sí, ya que su participación en el juego es intermitente. Pero él y el equipo intentarán regresar a los orígenes para brindar, el domingo en Castalia, otro triunfo a la grada, esta vez ante el Pontevedra... aunque sea con sufrimiento. "Si ganamos nosotros y el Ciudad de Murcia, está claro que nos jugaremos ante ellos el ascenso", vaticina.

Quero tampoco entiende qué demonios hacía Enrique Pina, hermano del presidente del Ciudad de Murcia pero el auténtico hombre fuerte del club rojillo, en el hotel de concentración del Castellón en Pontevedra, el Galicia Palace. "Si no llegamos a remontar, a saber lo que podría haberse dicho", reconoce, pese a que ningún jugador habló con este personaje. "Aunque puede ir donde quiera, no debió venir a nuestro hotel", opina el de Fuengirola. Y es que Quero sabe que las suspicacias, y más en las liguillas de ascenso, están a la orden del día. No obstante, quiere dejar muy claro una cosa: "A nosotros no nos compra nadie".