El Villarreal no ha podido culminar una gran semana, tras perder frente a un equipo que realiza la presión de forma notable y que contrataca a la perfección. Durante la primera mitad, hubo dos fases. La inicial, de dominio balear ante un Villarreal incapaz de salir de la presión. Y, los últimos 20 minutos, que fueron de total dominio amarillo, pero sin fortuna cara a puerta. Durante la segunda parte, el Mallorca bajó más el balón y culminó su juego con dos goles en apenas cinco minutos, aprovechando un buen desdoblamiento por banda derecha, que se repitió constantemente, y una pared perfecta, acciones culminadas por dos jugadores de gran calidad como Eto´o y Campano.
A pesar del golpe sufrido, el Villarreal no bajó los brazos y sacó el orgullo, mereciendo un gol por su espíritu de lucha. No obstante, se mantiene una buena posición en la tabla, con la buena noticia del regreso de Víctor.
