La pesadilla, como él dice, ha llegado a su fin. Edesio volverá el sábado a sentirse jugador. Y lo necesitaba como el aire para respirar. Los problemas musculares le han tenido esta temporada más tiempo alejado de las canchas que sobre el parqué. Disputó las cuatro primeras jornadas de Liga, pero después, en la primera fase de la UEFA Futsal Cup, cayó lesionado. Reapareció en la Copa Generalitat, pero recayó en el Municipal de Benicarló. Ahora, su peor sueño ha llegado a su fin. Y el equipo lo agradecerá. El sábado, regresa El Duende.
VUELVEN LOS GOLES "Una de mis funciones es aportar en el ataque y espero que el equipo mejore en esa faceta con mi regreso", señala el hispano-brasileño. Además, lo hará ante el Miró Martorell, equipo en el que juega el exalbiazul Vander Carioca. Ambos mantendrán un duelo particular del que depende buena parte de la suerte del partido. "Ojalá salga yo ganador", reconoce Edesio, quien apunta a la dificultad que entrañará un rival como el Miró, con muchas caras conocidas --además de Vander, Cupim, Óscar Redondo y Padú-- y en buena forma.
Pero aunque su evolución es buena, el cuerpo médico mantendrá ciertas precauciones. Así, según explicaba ayer el doctor Miguel Medina, Edesio jugará y entrenará "durante al menos dos semanas más" con un vendaje especial en el muslo. A su vez, seguirá haciendo sesiones dobles --por la mañana, con el fisio y por la tarde, con el equipo-- para ultimar su recuperación.
