El entrenador albinegro, José Luis Oltra, tenía motivos para encresparse en el banquillo. Primero, porque vio claros los dos penaltis sobre Javi Sanchis y Marcos no señalados por el árbitro --"fueron muy claros", apuntó--, y después por la no demasiada buena imagen de su equipo. "No hay que echar todas las culpas al árbitro por la derrota", observó. Sobre la expulsión de Palacios, Oltra indicó que fue su jugador el que sufrió un plantillazo, "por eso se revolvió", dijo.