El Santanyí prepara un recibimiento especial al Villarreal B. El conjunto mallorquín contará con el apoyo de su afición, casi por primera vez en la temporada. No en vano, será la primera ocasión que 1.000 espectadores acudan al estadio, cumpliéndose así los deseos de la directiva y de los jugadores. Al menos, esas son las previsiones. "Se espera la mejor entrada del año y sí, habrá presión ambiental", reconoce Jaume Mut, el técnico del conjunto balear, que elude la otra presión: "Ellos son favoritos".

Y es que el entrenador del Santanyí, que recupera a Toni Roig pero que no podrá contar con el sancionado David García, no se fía de las diabluras que son capaces de realizar los cachorros amarillos. "Me preocupa su calidad y, además, tienen el marcador a favor (la ida acabó 1-0), pero nosotros aún tenemos cosas que hacer. Estamos muy esperanzados", asegura Mut.

De este modo, los jóvenes jugadores del Villarreal B tendrá una importante prueba de fuego, en forma de un ambiente hostil, que confían en poder superar sobre un terreno de juego, de césped artificial, al que están acostumbrados. Superar está eliminatoria supondría luchar por el ascenso ante el vencedor del duelo Badalona-Caravaca.