Dinamarca y Suecia se clasificaron para cuartos con el resultado temido por los italianos, un 2-2 que deja fuera a los azzurri, que reclamaron fair play los días previos al partido entre los dos conjuntos nórdicos. Ambos entrenadores, obviamente, descartaron la posibilidad de un acuerdo, y la impresión fue que ambos equipos salieron desde el inicio a por la victoria, pero la sombra sobre un supuesto pacto recaerá siempre sobre ellos.