El Villarreal afrontó el partido de vuelta de la semifinal de la Intertoto, en el AOL Arena, con una precaución causada no sólo por la escasa renta obtenida ante el Hamburgo en El Madrigal (1-0), sino también por las sensibles bajas. Además de Calleja y Ballesteros, no viajaron el Pistolero Anderson ni Battaglia, aunque éste no fue por lesión, sino por los problemas burocráticos que le impidieron salir a tiempo de Argentina. Tampoco Riquelme estaba recuperado.

Poco o nada tendrá que ver ese ambiente con el que ahora afronta el Villarreal el compromiso de ida de la final. Sólo los dos primeros nombres, el del interior zurdo madrileño y el del central valenciano, están descartados para recibir mañana al Atlético de Madrid. Y es que Battaglia ya está de vuelta, Anderson ha dejado atrás sus problemas de rodilla y Riquelme está listo para volver a jugar, después de estar inédito durante toda la pretemporada por la pubalgia. Hasta Armando Sá, que había encendido las señales de alarma el sábado, después de no participar en ninguna de las dos sesiones preparatorias dispuestas por Manuel Pellegrini, ha olvidado, por el momento, la tendinitis.

¿TODOS AL ´ONCE´? Otra cosa será averiguar si todos ellos aparecerán como titulares. El lateral derecho y el ariete sí lo serán, pero ¿y Battaglia y Riquelme? El primero, aunque no recibirá ninguna sanción del club, puede pagar con la suplencia su no comparecencia en Hamburgo, donde su sustituto, Marcos Senna, se marcó un partidazo.

En cuanto a Román, su poco rodaje parece aconsejar, de entrada, el banquillo, pero las declaraciones que el entrenador Manuel Pellegrini ha realizado en los últimos días, en las que ha dicho que el exazulgrana, estando bien, "por su trayectoria y su jerarquía debería ser por supuesto titular", le abren las puertas de la titularidad. Si es así, el prometedor Cazorla dejaría su puesto en el once.