La Real Sociedad logró su primera victoria de 2005 en Anoeta en un partido disputado contra un buen Sevilla que no acusó el cansancio de su partido europeo en tierras griegas, pero que terminó cediendo a cuatro minutos del final cuando Darko Kovacevic consiguió el único gol del encuentro (1-0). El serbio, con un bello remate, le dio a su equipo un balón de oxígeno.

El conjunto guipuzcoano funcionó bien hasta la lesión de rodilla de Nihat, que asumió el protagonismo y dispuso de las mejoras ocasiones de gol locales, la primera en un disparo muy lejano al saque de una falta que Esteban. Cuando Anoeta suspiraba por el empate, llegó el gol y la euforia del equipo local.