Defensa de emergencia en Vitoria. No le queda otra al técnico del Villarreal, Manuel Pellegrini, ante el último contratiempo de la lesión del argentino Gonzalo Rodríguez durante el entrenamiento del pasado martes. Ayer, el entrenador chileno realizó el antepenúltimo ensayo para el encuentro del próximo sábado ante el Deportivo Alavés, y lo hizo con el italiano Alessio Tacchinardi formando una curiosa pareja de centrales junto con el canterano César Arzo.
La prueba fue señal inequívoca de que Gonzalo sigue siendo una seria duda para jugar en Mendizorroza. Ayer, se limitó a trabajar en el gimnasio, mientras que fue Tacchinardi el que tuvo que recordar algunas nociones de defensa en línea para cubrir la posible ausencia del argentino. El experimento tiene dos lecturas. La positiva es que con el italiano, el Villarreal ganará en control y en salida de balón desde el centro de la defensa; la negativa, por contra, es que los amarillos pueden sufrir en exceso su ya de por sí manifiesta irregularidad en la defensa de los balones aéreos, uno de los talones de Aquiles en este inicio de la temporada.
¿EL ´ONCE´ DE VITORIA? Con la incógnita de la evolución de Gonzalo Rodríguez, Pellegrini dispuso ayer en la Ciudad Deportiva una alineación que bien podría ser la que se mida de inicio el sábado al Alavés, con las excepciones del guardameta Barbosa --jugará Viera-- y del jugador del Villarreal C que hizo el papel de Lucho Figueroa --regresa hoy de Argentina--, ya que Pellegrini tan sólo disponía en la sesión de ayer de 10 efectivos para prepapar el próximo encuentro.
Sobre el papel, en la defensa se perfila el cuarteto formado por Javi Venta, Tacchinardi, César Arzo y Arruabarrena; en el centro del campo, Cazorla y Roger en las bandas, con Marcos Senna y Josico en el doble pivote; mientras que el ataque parce destinado a José Mari y a Lucho.
