El nuevo Athletic de Clemente no acaba de jugar bien fuera de casa, pero pelea en todos los partidos hasta la extenuación y, hasta el momento, puntúa siempre.

Desde el tercer regreso del técnico vizcaíno a Bilbao, el equipo rojiblanco no conoce la derrota fuera de casa, donde ha ganado dos encuentros y ha empatado otros dos. Las victorias fueron en Sabadell (1-3) en Copa,y en Mallorca (0-1) en Liga, mientras que los empates, ambos en Liga y con sendos 1-1, fueron frente a Espanyol y Valencia.

Sello personal

Y es que desde su llegada, el conjunto bilbaíno es puramente un conjunto de Clemente. Además, el técnico no elude protagonismo. Al contrario. Comparece casi a a diario en rueda de prensa, cambia el once inicial a su antojo, el equipo juega como a él le gusta y los resultados están llegando. No obstante, esos buenos resultados, que son los que están permitiendo al conjunto vasco irse recuperando de un inicio de temporada casi catastrófico, no son consecuencia de un buen juego. Si acaso, el Athletic estuvo bien en los minutos que duró la remontada de la Creu Alta ante un rival de Segunda B.

Pero, en general, la buena cosecha del equipo bilbaíno a domicilio se debe más a la pelea que planta a sus rivales a lo largo del choque que a virtudes recuperadas con respecto a la etapa de José Luis Mendilibar.

Un reflejo muy claro de lo que está siendo el Athletic de Clemente de visita fue el partido de Valencia, donde sumó un punto después de haberse visto superado en muchas fases del choque. Pero el conjunto rojiblanco fue capaz de sobreponerse a las circunstancias adversas que se le fueron presentando --incapacidad en ataque, expulsión de Tarantino, empate en inferioridad, asedio final de los locales ...-- y regresó con un botín nada despreciable.

El 1-1 podría ser más importante con una victoria el sábado frente al Betis, ante el que el Athletic se jugará más que los tres puntos en juego, ya que el sevillano es uno de sus rivales en la lucha por la permanencia y al que traspasó la condición de colista la pasada jornada.