La familia albinegra está viviendo una semana especialmente dura. Primero, por el fallecimiento, anteayer, de Antonio Alegre Agost, exdelegado del Juvenil del Castellón. No ha sido el único hecho luctuoso, ya que también han perdido la vida el exjugador Manolo Doménech Pinto y el delegado Ángel Pons Prades.

Doménech, apodado Bocadillo, acababa de cumplir 80 años y vivía en Sevilla. Formado en la cantera albinegra, debutó en Primera División con 17 primaveras y, en verano de 1946, fue traspasado al Sevilla, con el que fue campeón de Liga (1947) y Copa (1948). Llegó a ser internacional absoluto en tres ocasiones --la primera, el 19 de junio de 1955-- antes de regresar al Castellón en 1959, al que ayudó a ascender a Segunda División, colgando después las botas en 1961.

Además, esta tarde, en el Nuevo Tanatorio de Castellón, se celebrará el sepelio por Ángel Pons Prades, integrante del cuerpo técnico del Juvenil C.