Vuelve a sentirse futbolista. Le ha costado sudor y lágrimas, pero Jonan García está en disposición de volver a demostrar que su destacada actuación, la pasada temporada con el Athletic de Bilbao en Primera División, no ha caído en saco roto.

Las crónicas le apuntaron como el mejor del Castellón-Albacete. Ahora, afronta la confirmación. "Creo que lo tenía más difícil la pasada jornada, porque venía de cinco semanas sin jugar nada y, ese supuesto, siempre cuesta más entrar", dice él, quitándole hierro a la reválida. "En mi caso, hay que tener ganas siempre y una buena actitud, porque, si no, a la semana siguiente puedes pasar del equipo titular a la grada", añade. Es algo que sabe por propia experiencia.

Sin duda, una cuota importante de responsabilidad de su notable rendimiento frente a los manchegos, la tuvo su clarividente conexión con Castell. "Me sentí muy a gusto tanto con él como con Miguel García", dice, "aunque en la segunda parte hubo más huecos".

CLARIVIDENCIA Y cara a la visita a Tarragona, Jonan tiene receta para vencer y resultado. "Debemos aguantar los primeros compases del encuentro y pillar alguna contra para marcar el 0-1", relata. "Y luego, en la segunda parte, aprovechar que ellos están volcados para sentenciar", rubrica. Bueno, también le sirve "el 1-2, el 0-1..."... "¿El 0-0? Estamos ahí abajo y necesitamos ganar", sostiene. "Sería un buen resultado si ellos tiraran tres postes, nosotros acabamos con nueve...". El caso es que el N stic lo pasa muy mal como local.