No pudo ser. El GyC L´Illa Grau descendió de Superliga y este año deberá pelear por retomar la categoría perdida en la Liga FEV. Para el nuevo proyecto, el club ha dejado el equipo masculino en las manos de Carlos Cavalli, que ha visto cómo cinco de sus jugadores han salido de la disciplina del club. El nuevo entrenador intentará que el equipo termine, por lo menos, entre los seis primeros para entrar el próximo año en la nueva Superliga B. Pero no se pone techo: "Acabar entre los dos primeros y subir es un sueño al que no vamos a renunciar". Una de las ausencias más lamentadas por el técnico será la de Pablo Herrera, "la bandera del club". El conjunto apostará por los jóvenes canteranos en una temporada que se inicia el 7 de octubre en Palencia.