El nuevo Real Madrid, dirigido por primera vez por Fabio Capello en la máxima competición continental, se somete al examen más exigente en Lyón ante el Olympique, equipo que le vapuleó en la pasada edición de la Champions y ante el que inicia su senda europea con ganas de venganza.

No será éste el único punto de atención del partido, que supone el regreso de Mahamadou Diarra, el que fuera el pulmón del conjunto lionés, del que no salió por la puerta grande, al menos a tenor de su negativa a seguir jugando con este equipo si no le traspasaban al club merengue.

El Madrid inicia el camino hacia la que espera que sea la décima Copa de Europa sin Míchel Salgado ni Ronaldo, pero sí con su equipo de lujo.