En un deporte tan profesionalizado como el fútbol, resulta increíble como los clubs, que pagan traspasos y nóminas millonarias, ceden a sus jugadores a otra empresa que disfruta de ellos sin responsabilidad alguna. El miércoles estuve en Murcia presenciando el España-Argentina y sentí alivio cuando Arruabarrena y Somoza salieron por su propio pie, pues jugar en ese campo era un grave riesgo para los futbolistas. Incluso, los técnicos se plantearon la suspensión, pero a las federaciones les importa poco lo que pase, ellas no pagan.

¿Quién indemnizara al Villarreal por tener KO a Nihat un mes? Yo les respondo: Fernando Roig. Nadie más.