ASE SABÍA que la Real iba a salir empujando, porque no tiene otras armas, pero nos encontramos otra vez con el Villarreal rutinario, desdibujado en todas sus líneas. Muy pronto, Viera se tuvo que lucir ante Fabio Felicio.

BA SU GUSTO. Así estaba el partido para los locales, que obligaban a los tocadores del Submarino a jugar en zonas intrascendentes alejadas del área. Las posesiones eran cortas e ineficaces.

CEL PLAN DE ATAQUE parecía no existir en los amarillos. Poca profundidad, jugadores muy estáticos y pocas opciones para los pasadores. El primer pase con criterio lo dio Senna, propiciando el cabezazo de Nihat. Eso era todo.

DMEJORES MANERAS ofrecía la Real Sociedad, algo mejor ubicada en el campo, buscando las bandas. Además con un excelente Uranga, un quebradero de cabeza para el Villarreal por su movilidad e inteligencia a la hora de buscar los espacios libres.

EERA EL COLISTA, porque, con otro equipo enfrente, el Villarreal lo hubiera pasado mucho peor. La Real Sociedad movió mejor la pelota y logró llegar en varias ocasiones a zona de remate, pero nunca logró acertar en la finalización. Esa fue la suerte para los de Pellegrini.

FLOS MINUTOS DE ROMÁN. El fútbol previsible de los amarillos se tomó tiempo muerto en la recta final de la primera parte, cuando Román pudo jugar mas cerca del área rival, tal vez aprovechando que la Real bajó la presión. Una asistencia suya se la sacó Bravo a Forlán.

GUNOS IGUAL, los amarillos; y otros peor, los donostiarras. Así se reanudó el encuentro. El Villarreal tuvo cinco minutos buenos y se disipó. Los de Miguel Ángel Lotina volvieron a empujar, pero ya sin la misma claridad. Todo estaba muy parejo.

HDEMASIADO EXIGIDOS. Pero como este Villarreal no acaba de mandar, sufre demasiado. Viera sacó un patadón de Rossatto y vio que le cabeceaban demasiado. Somoza defendía bien, pero elaboraba mal: Román y Senna eran intermitentes.

ILO QUE PUDO SER el 0-1 en el remate de Forlán, lo sacó de la línea Bravo. Luego, la tuvo la Real con otro cabezazo, pero acabó marcando Arruabarrena, con Bravo dubitativo por arriba y un local defendiendo desde dentro de la portería.

JAL INFIERNO se fue la Real, que no tuvo ni la reacción de la víctima de la injusticia. No mereció perder, pero no acaba de carburar.