Al Castellón no le sientan bien los partidos matinales. Ni tampoco le viene nada bien el Málaga. Ni desde luego los primeros minutos de los partidos contra los futbolistas malagueños. En la ida, en Castalia, apenas se habían sentado los espectadores albinegros y los andaluces ya se habían adelantado en el marcador. Y ayer domingo no pasó únicamente eso, sino que también en muy poco espacio de tiempo, fueron capaces de marcar dos goles y dejaron a los albinegros con tan solo diez hombres por la expulsión del canterano Pepe Mora.

Con todo y con ello, el equipo albinegro estuvo a punto de meterse en el partido en el segundo periodo con su gol, pero de nuevo en la jugada siguiente los pupilos de Pepe Murcia encajaron el tercer gol de los andaluces. Demasiada adversidad para un equipo que, eso sí, nunca volvió la cara, que hizo todo un derroche en el aspecto físico y que se vació sobre el campo.

Hay que resaltar también que en este tipo de partidos, en las temporadas anteriores el equipo daba pena y apenas inquietaba a su rival. Ayer, sin embargo, los albinegros lucharon con vergüenza torera.