Manuel Pellegrini no digirió bien anoche la eliminación de la Copa de la UEFA a manos del Zenit de San Petersburgo. El técnico chileno del Villarreal, con cara de pocos amigos, compareció ante los medios de comunicación para analizar su particular versión del partido celebrado en El Madrigal y de la eliminatoria de dieciseisavos en general, asegurando que "no entraba en los planes del equipo el caer tan pronto y ante un rival, para mi, inferior" al Submarino.

"Desgraciadamente quedamos eliminados. Creo que es una eliminatoria muy injusta y, aunque no sé si en fútbol existe esa palabra, sé que fuimos muy superiores, pero no pudimos completar lo que nos faltaba en el marcador", manifestó contrariado.

UN DURO GOLPE El preparador suramericano incidió de nuevo en el duro golpe que supone esta eliminación. "La verdad, no entraba en los planes caer tan pronto, y ante un equipo que, para mi, fue mi inferior al Villarreal", dijo Pellegrini, además de desear que este "duro golpe" no afecte demasiado al equipo. "Vamos a intentar levantar el ánimo muy pronto porque en la Liga estamos arriba, aunque es muy doloroso quedar fuera", agregó el chileno.

Del partido, el técnico amarillo comentó que el sistema de juego del Submarino funcionó, ya que se crearon "muchas ocasiones de gol", aunque lamentó "no haberlas resuelto".

Por su parte, Dick Advocaat, entrenador holandés del Zenit de San Petersburgo, destacó estar "muy feliz" por la clasificación para octavos de final y calificó tanto el partido de ayer como la eliminatoria de "muy difícil".

"El Villarreal apretó desde el inicio, pero nosotros salimos a intentar marcar y a buscar la victoria", declaró Advocaat, quien no dio importancia a su expulsión del partido por protestar.

El sueño europeo del Submarino se esfumó anoche en un partido en el que los amarillos pagaron cara su falta de puntería.