Desde su infancia en su Tàrrega natal hasta que pasara a formar parte del filial del Espanyol en Segunda División B, Joan Capdevila se había destapado como delantero y/o extremo. Zurdo, de una potencia descomunal, el hábil y escurridizo atacante fue reconvertido a su llegada al club periquito a interior y finalmente a lateral. Los jugadores de pierna izquierda de nivel escasean en el fútbol de élite y más aún en defensa.

Por eso mismo, el internacional tuvo que ir poco a poco cambiando el chip, aunque nunca dejó en el olvido ese instinto goleador que siempre lleva consigo todo aquel que algún día fue delantero a lo largo de su carrera.

Siempre ha tenido el gol entre ceja y ceja. Evidentemente, no se le puede considerar un artillero, pero sí un defensa que aporta entre cuatro y cinco goles por temporada los cuales, además, suelen ser decisivos para sus equipos. Espanyol, Atlético de Madrid, Deportivo de la Coruña y ahora Villarreal, en todos los clubs en los que ha militado ha visto portería.

DE MODA Precisamente en estos momentos está siendo un defensa decisivo para los intereses del Submarino. Joan Capdevila, autor del segundo de los dos tantos de la victoria amarilla por 1-2 ante el Athletic Club de Bilbao, acumula tres goles en los últimos seis compromisos ligueros. Esta circunstancia le ha convertido en el máximo goleador del conjunto de la Plana Baixa en la segunda vuelta de campeonato.

Pese a ello, el de Tàrrega no le da importancia a su faceta anotadora. "Ser uno de los defensas que más goles marca es algo anecdótico. Estoy muy contento, ya que sirve para ayudar al equipo. Pero este no es mi trabajo, ya que para eso están los delanteros. Aunque si puedo marcar y colaborar con el equipo, mejor que mejor", indicó el defensa, que ya lleva tres goles en Liga y uno en la Copa de la UEFA.

Evidentemente, el secreto de Capdevila radica en su infancia. "Cuando llegué al Espanyol me pusieron de lateral, pero siempre fui delantero y es posible que todavía me quede algo y no he perdido ese olfato de gol", afirmó un Capdevila que sueña con hacer cosas importantes tanto en el Villarreal como con la selección española en la Eurocopa.