Guille Franco se ha convertido en una de las piezas claves de su equipo en el buen momento que este atraviesa y en poco menos de un año ha pasado de ser un futbolista cuestionado por la afición, a convertirse en uno de sus ídolos. El atacante vivió un cambio radical en el último año, ya que a estas alturas del campeonato de la temporada anterior fue silbado por su afición frente al Celta, tras su entrada al campo al sustituir a un compañero.

Los silbidos y protestas de su afición fueron acallados por el delantero que anotó un gol que sirvió para que el Villarreal consiguiera la victoria por la mínima en aquel encuentro. A pesar de las lesiones que ha padecido desde su llegada al club a mediados de la temporada 05-06 y a la incorporación al Villarreal de delanteros de primer nivel como Tomasson, Nihat o Rossi, Guille es a día de hoy el delantero clave en la buena racha de resultados.

El mexicano ha tornado los silbidos en aplausos e incluso la suplencia por la titularidad. Tanto es así que Manuel Pellegrini aseguraba recientemente que "con Franco siempre he sabido que no me equivocaba. A pesar de que las cosas no le han ido bien, lo he tenido en otros equipos y era consciente de su potencial".

De los últimos ocho partidos invictos del Villarreal, el punta ha sido la figura en la mayoría de ellos y sobre todo con sus goles ante Murcia, Bilbao y Levante.

LA GUINDA Franco ha logrado incluso hacer cambiar de idea a su seleccionador Hugo Sánchez, quien a su llegada descartó de sus convocatorias al atacante vila-realense, y esta semana ha vuelto a citarlo para jugar con su selección ante Ghana en Londres.