El más que notable incremento en el precio de la superlicencia para poder competir en la Fórmula 1 ha alimentado el rumor de una posible huelga entre los pilotos de la máxima categoría, algo que el español Fernando Alonso, doble campeón mundial, estaría dispuesto a apoyar en el caso de que sea unánime.

Hasta el año pasado, el precio de una superlicencia era de 1.690 euros más 447 por punto obtenido. La próxima tarifa, aprobada a principios de año por la FIA, se dispara a 10.000 euros más 2.000 por punto sumado. Un incremento que ha dejado atónitos a todos los pilotos, incluido Alonso.

"Me acabo de enterar. Dicen que si va a haber una huelga en Silverstone (Gran Premio de Gran Bretaña, a principios de julio)... Yo de huelga no sé nada. A ver qué se dice mañana --hoy para el lector-- en la reunión (de pilotos). Igual han hablado entre algunos pilotos y yo no me he enterado. A ver qué pasa", señaló el español.

Por su parte, los cuatro primeros clasificados del Mundial coincidieron en que ven pocas posibilidades de éxito de una supuesta huelga de pilotos. El polaco Robert Kubica (BMW Sauber), líder del campeonato, señaló que no ve razones que justifiquen dicha medida. "Por supuesto que apoyo a todos los pilotos y que es mejor que no sea tan cara y que sea igual para todos, pero a la vez no veo motivos para hacer una huelga y dejar de correr", indicó.

El británico Lewis Hamilton (McLaren Mercedes), segundo en el campeonato del mundo, y que no pertenece a la asociación de pilotos de Fórmula Uno, se limitó a señalar que pese a no ser miembro de la GPDA, apoya las reivindicaciones de sus compañeros.

Los dos pilotos de Ferrari, Felipe Massa y Kimi Raikkonen, también reconocieron que el precio es muy alto, pero hay compañeros que no pagan tanto y será difícil unificar el criterio.