Joseba Llorente sonrió ayer como futbolista del Submarino. El delantero vasco aún no había visto portería con la elástica amarilla en competición oficial y se estrenó en Soria. El tanto del ariete sirvió para que el Villarreal se llevara los tres puntos de Los Pajaritos, circunstancia que hace que sea mucho más importante su primer gol del de Fuenterrabia.

"Necesitaba este gol como el comer. Llevaba semanas diciéndolo, porque un delantero vive del gol. Con mi trabajo estoy feliz, porque siempre he luchado y sabía que el balón entraría", comentó, a la vez que añadió que "por fortuna rompí el maleficio en Soria". "He tocado tres balones y he metido uno, no puedo quejarme de nada", confesó.

El tanto de Llorente valdrá, además, para que el delantero gane en moral. "Esto me servirá para ganar en confianza y conseguir que la gente no sea impaciente", destacó un goleador que dijo estar "muy feliz por lograr mi primer tanto oficial con la camiseta del Villarreal".

"Nunca he dejado de confiar en mí y ahora he demostrado que puedo ayudar mucho al equipo. Además, este gol va para mis padres y para mi hija, recién nacida", añadió el goleador.

Para Llorente, "la clave para ganar ha estado en saber tener mucha paciencia, ya que en la segunda mitad fuimos mejores".