Carlos López, pese a tener 20 años, ya había militado en el Villarreal, Onda y Castellón. Su primer club fue el Submarino, en el que entró en la temporada 99/00. Después de ser máximo goleador del juvenil A, su insistencia por jugar en el equipo de su pueblo le llevó, en 2006, a La Serratella, convirtiéndose de nuevo en el pichichi de la plantilla.

En verano del 2007, Dani Barroso, director deportivo del Castellón, tenía prácticamente cerrada su incorporación al Amateur, pero una grave lesión retrasó su fichaje un año.

Carlos López acababa de vivir unos meses inolvidables. Reclutado por Abel Resino, jugó seis amistosos con el primer equipo, para un total de 144 minutos, habiendo debutado ante sus paisanos. Y, con el Amateur, tuvo el honor, el 31 de agosto, de conseguir el primer gol en partido oficial de un conjunto albinegro en la Ciudad Deportiva Facsa, al marcar el 1-1 provisional contra el Juventud Barrio del Cristo.