El Madrigal cerró sus puertas en la Liga de Campeones el ya lejano 25 de abril del 2006. Aquel fatídico día fue el último en el que la afición del Villarreal escuchó de primera mano el famoso himno de la Champions, eran las semifinales de la máxima competición continental y el Arsenal le aguó la fiesta a los amarillos, más concretamente el meta Lehmann, que atajó un penalti decisivo a Riquelme. Casi dos años y medio después, el coliseo del Submarino regresa a la élite y lo hará ante uno de los clásicos del Viejo Continente, el Celtic de Glasgow, que tiene el privilegio de ser el primer club de las Islas Británicas en ganar una Copa de Europa (66/67).

Tras empatar a cero en el estadio más difícil del grupo E, Old Trafford, el conjunto de Manuel Pellegrini regresa con toda su artillería a su estadio, con la Armada Invencible que lideran los campeones de la pasada Eurocopa: Marcos Senna, Joan Capdevila y Santi Cazorla.

Los héroes de Austria y Suiza son conscientes de lo que supone para Vila-real y para la provincia de Castellón volver a la máxima competición continental. Los tres desean cuajar una gran Champions y analizan para Mediterráneo qué esperan tanto del inminente duelo frente al Celtic de Glasgow como del resto de Liga de Campeones.

Ninguno de los tres quiere marcarse una meta, pero bien es cierto que reflejan claramente la filosofía del club, ya que no renuncian a nada y tienen presente que el único objetivo es el consabido de "ir partido a partido y llegar lo más lejos posible".

SENNA, EL JEFE DEL EQUIPO El internacional hispano-brasileño fue titular en aquellas semifinales frente al Arsenal. Fue su única participación en la Liga de Campeones, pero la recuerda con añoranza. "Fue bonito vivir y sentir todo aquello. Eliminar al Manchester en la primera fase y luego a Rangers, Inter y plantarle cara al Arsenal no está al alcance de cualquiera", explica. Para el jefe del vestuario amarillo, el hecho de que ya hayan pasado tres temporadas es "positivo", puesto que "el Villarreal ha ganado en experiencia, ha crecido como club y ahora somos un equipo respetado en España y en Europa".

Para este veterano mediocentro, la actual es "una de las últimas oportunidades de hacer algo grande en la Champions". "Esta competición es muy bonita, pero desgasta mucho y debes disfrutarla cuando estás inmersa en ella, ya que no sabes cuándo volverás a poder jugarla", arguye. Por eso mismo, espera que "en los partidos de casa El Madrigal sea un fortín y, a su vez, nosotros tengamos la entereza suficiente para lograr los nueve puntos en juego". Para el ex del Sao Caetano es vital "ser fuertes en tu propio campo", ya que gracias a ello "se logrará el billete a octavos, que es nuestro primer objetivo".

Senna considera que el Submarino es ahora "un equipo más maduro". "No debemos trazarnos ningún reto, porque eso es mucho peor. Lo que sí es cierto es que nadie debe subestimarnos. Aspiramos a lo más alto, aunque luego ya veremos dónde nos sitúa la competición", finaliza.

El más pipiolo en estas lides es Santi Cazorla. El de Lugo de Llanera solo tenía 21 años cuando el Villarreal disputó su primera Champions de la historia . Tras brillar el año anterior (2004/05) en la Copa de la UEFA con los amarillos --hizo cuatro goles--, Manuel Pellegrini apenas le dio confianza en la máxima competición continental una campaña después. Cazorla tenía rol de canterano y solo jugó dos encuentros, aunque tuvo el placer de saltar al rectángulo de juego en la recta final del partido de ida de los cuartos de final, nada más y nada menos que en el coliseo de San Siro ante el Inter.

CAZORLA, CONSAGRADO Tres ejercicios más tarde, el mediapunta asturiano es un futbolista maduro, consagrado al máximo nivel, no en vano fue partícipe en cinco de los seis encuentros de España en la Eurocopa y, además, se permitió el lujo de decirle "no" al campeón de Liga, el Real Madrid, el pasado verano, en uno de los culebrones que más repercusión tuvieron.

A POR TODAS "Pude disfrutar muy poco aquella Champions, pero ahora espero hacer cosas importantes y ayudar al Villarreal y a su afición a soñar con lo máximo", comenta. Cazorla no quiere que nadie se asombre si los amarillos no renuncian a nada, ya que pone como ejemplo la Eurocopa lograda con la selección, en la que tanto él, como Senna y Capdevila fueron protagonistas importantes en el combinado que dirigía Luis Aragonés.

"Tenemos un equipo competitivo, con jugadores importantes y que ha alcanzado recientemente el subcampeonato de Liga. Por tanto, debemos ser ambiciosos, aunque con los pies en el suelo. En junio nadie creía que España iba a ganar la Eurocopa y, sin hacer ruido, lo conseguimos. En el fútbol todo es posible", argumenta el campeón de Europa.

LÍDER EN EL VESTUARIO Santi Cazorla aún no ha cumplido los 24 años --lo hará el 13 de diciembre--, pero ya es uno de los referentes y activos más importantes del Submarino más ambicioso de la historia. Por eso mismo, se siente "con la responsabilidad de liderar al equipo junto con otros jugadores importantes como Marcos Senna, Pirès, Ibagaza o el propio Joan --Capdevila--, que ha disputado en cinco ocasiones la Liga de Campeones".

"Que la afición tenga claro que vamos a darlo todo, porque tanto para nosotros como para el club el reto al que nos enfrentamos es muy importante", reconoce el asturiano, añadiendo para terminar que "el primer paso para seguir en buena línea será ganar al Celtic de Glasgow, en un partido que no será nada sencillo, pero que sacaremos adelante".