Bares, tiendas y hoteles están haciendo su particular ´agosto´ con la llegada del Celtic, pero hay otros ´negocios´ no tan respetables como estos que también se lucran de la afición escocesa, aunque en su caso lo hacen de forma ilegal e inmoral.

En los aledaños de El Madrigal se podía ver ayer a reventas que, por si fuera poco, no distribuían entradas válidas sino fotocopias de las mismas. El precio de estos pases falsos rondaba los 80 euros, cuando en el estadio las oficiales costaban 90.