Dos goles de Dimitar Berbatov y uno de Wayne Rooney le dieron al Manchester United su primer triunfo en la Champions 2008/09 en casa del modesto Aalborg, en una victoria de trámite frente a un rival inferior y que nunca inquietó al campeón de Europa.

El Manchester dejó claro antes del pitido inicial del árbitro que no quería sorpresas. Apenas incluyó novedades en su once titular, la más llamativa la del joven lateral brasileño Rafael, que dejó una buena impresión y rozó el gol en un par de tiros lejanos.

Si Rooney y Berbatov estuvieron acertados cara a gol, más discreto estuvo Cristiano Ronaldo, lejos todavía de su mejor nivel. Pero la principal preocupación de Alex Ferguson, vistas las diferencias, no estaba en el campo, sino en la enfermería. Además de Scholes, también Rooney y Rafael se fueron tocados, aunque solo el primero pareció lesionado de cierta importancia.