La Unión Deportiva no está bien, pero goza de una excelente salud comparada con la pasada temporada, cuando en estas mismas fechas era colista destacado. En la 10ª jornada fue destituido Juanito. Con Juan Manuel Rodríguez, su sustituto, la reacción fue increíble. El equipo acabó octavo.

Tal vez esa espectacular remontada hizo que más de uno perdiera la noción de la realidad económica y deportiva de la entidad amarilla, soñando con ascensos y hazañas. No era para tanto.

Tras perder ante el Alavés en la sexta jornada, al presidente le preguntaban por la situación del técnico. Miguel Ángel Ramírez respondía: "Hay que esperar a la 10ª jornada para sacar conclusiones. El año pasado, al ver que no íbamos bien, tomamos medidas sin complejos. Seguro que el entrenador analiza los errores, y cuando llegue esa jornada, el balance será positivo, no me equivocaré". No dijo que a Rodríguez le habían dejado sin Colunga (13 goles), Christian y Trashorras, tres de los cuatro jugadores básicos.

Como los directivos no se equivocan nunca, hoy, 1 de noviembre, en el día de los muertos, con un presidente que le ha cogido el gusto a eso de las misas de réquiem, la cosa tiene mala pinta para el entrenador.