El presidente de la Federación Internacional del Automóvil, Max Mosley, declaró ayer desconocer la disconformidad de los equipos del Mundial con el sistema de puntuación que la FIA pretendía implantar, decisión rectificada el viernes.

"Ecclestone me había dicho que había hablado con todos los equipos y que estaban conformes, y eso me ha inducido a pensar que todos estaban de acuerdo y el Consejo Mundial tenía la impresión de que eran favorables", aseguró el británico en declaraciones a Daily Telegraph. El nuevo sistema consistía en proclamar campeón del mundo al piloto que ganara más Grandes Premios.