El Real Madrid cumplió el expendiente. Estaba obligado a ganar al Almería para mantener su acoso al Barça y lo hizo (lleva 37 de los últimos 39 puntos), pero con un juego aburrido que volvió a recibir las críticas del Bernabéu. De ahí que los aplausos más calurosos se los llevó el mexicano Hugo Sánchez en su regreso a casa.

Sin Guti sobre el terreno de juego por decisión técnica, el conjunto blanco no jugó a nada, especialmente en la primera parte ("Guti es muy aprovechable y vamos a intentar sacarle lo mejor, pero he preferido darle descanso porque en la plantilla hay 25 jugadores", se justificó Juande).

El centro del campo no existía y el balón no llegaba a las áreas, de ahí que la principal tensión se vivía en la grada ante el nerviosismo que propiciaba el empate. Pero apareció Marcelo para inventarse el 1-0 y dedicarle el gol a su futuro hijo y a Juande en el partido 50 del brasileño en Primera.

En la segunda parte el juego no mejoró, porque el Almería llegó de paseo a la capital. Y ante tantas concesiones, Huntelaar se reivindicó con dos goles (lleva 8) para demostrar que fue un error dejarle fuera de la Champions.