Todos los equipos rodaban ya este invierno con la aerodinámica del 2009 y McLaren todavía seguía utilizando el alerón trasero del 2008. Era extraño. Era evidente que tenían un problema. No es que estuvieran escindiendo un diseño revolucionario, más bien escondían sus problemas, intentaban, sobre todo, recuperar la dirección correcta. Los ingenieros andaban perdidos y necesitaban desandar parte del camino hasta encontrar una referencia que les indicara el buen camino.

"Si ruedas con ellos, se nota que tienen problemas aerodinámicos", explica Rubens Barrichello, piloto de Brawn GP, que disfruta del mismo motor Mercedes que equipa a las flechas plateadas. "Es fantástica su fuerza, su progresión", enfatiza para diferenciarlo del Honda. Evidentemente, lo de McLaren no es problema de motor, porque Brawn ha pulverizado todos los récords durante la pretemporada.

"Estamos aquí, en Melbourne, sabiendo que va a ser muy difícil ganar, pero todo el equipo trabajará al máximo para ayudarnos a volver a estar delante", afirma Hamilton, que empezará defendiendo su título con dificultad.

LEJOS EN LOS TESTS El MP4-24 "está por detrás de los coches de otros años en estas fechas". Se pudo ver en los últimos tests de pretemporada en Montmeló y en Jerez, donde el MP4-24 estuvo siempre entre los peores tiempos. Solo en los últimos días de los últimos ensayos andaluces pudo acercarse a los mejores registros cuando, parece, el coche incorporó un nuevo difusor más parecido a los de Brawn GP, Williams y Toyota. A pesar de todo, Hamilton confía ciegamente en el esfuerzo del equipo: "Lo mejor de todo --dice el campeón-- es que no recibo ningún tipo de presión por parte de mis jefes o patrocinadores".

De momento. Depende de cuál sea el verdadero problema. Marc Surer, el veterano de casi 90 grandes premios en los años 80, cree que McLaren "no va de farol, tiene un problema aerodinámico". Si fuese eso, no hay problema. La aerodinámica se trabaja en el túnel del viento. Peor sería si se confirma que el chasis del MP4-24 es un diseño fallido.

Si es así tendrían que partir de cero, diseñar un nuevo coche, pero sin poder probarlo antes de la celebración de una carrera.

UN TRABAJO DE CHINOS Todo se reduce a intentar proporcionar más adherencia con cambios en la aerodinámica y, sobre todo, en las suspensiones, en la parte mecánica de la adherencia.

Y ahí la falta de ensayos privados también juega en su contra. Pedro de la Rosa apenas ha podido rodar cinco días en toda la pretemporada (limitada a 15.000 kilómetros), compartiendo responsabilidad con Hamilton y Heikki Kovalainen. Pero ni el inglés ni el finlandés tienen la experiencia ni la sensibilidad suficiente para este trabajo. Es evidente que McLaren echa en falta a Fernando Alonso a la hora de crear su coche. Sin el asturiano, mágico en ese trabajo, todo es más difícil.