Una engañosa goleada, con tantos del argentino Éver Banega, del uruguayo Diego Forlán --ha marcado nueve goles en los últimos diez partidos-- y del portugués Simao Sabrosa, reforzó las opciones de Liga de Campeones del Atlético de Madrid, que vivió un partido muy incómodo, ahogado en el despliegue ofensivo de un luchador Numancia, que nunca mereció encajar un 3-0 en el marcador.

Fue una victoria imprescindible para el equipo rojiblanco, que solo se sintió con el encuentro en su poder en el tramo final del duelo y al que favoreció una decisión del árbitro Alberto Undiano Mallenco, que anuló un gol legal a Javier Barkero con 1-0 en el marcador. El Atlético durmió ayer en posiciones Champions.